lunes, setiembre 26, 2005
domingo, setiembre 11, 2005
Más de un año después
Bien pues aquí estoy de nuevo escribiendo cosas que nadie lee, al menos ahora me he metido a flickr y espero poder revisar nuevas cosas... esta vez de veras.
Es increíble lo que le pasa a uno cuando baja la guardia, en un momento estás bien y al otro te revientas, es como si de pronto se te cayeran los lentes y zas no puedes leer, o ves diferente o nada o todo o solo a ella. Me viene a la cabeza una rayuelada tomada de su capitulo 126
Por qué, con tus encantamientos infernales, me has arrancado a la intranquilidad de mi primera vida... El sol y la luna brillaban para mí sin artificio; me despertaba entre apacibles pensamientos, y al amanecer plegaba mis hojas para hacer mis oraciones. No veía nada de malo, pues no tenía ojos; no escuchaba nada de malo, pues no tenía oídos; ¡pero me vengaré!
Es increíble lo que le pasa a uno cuando baja la guardia, en un momento estás bien y al otro te revientas, es como si de pronto se te cayeran los lentes y zas no puedes leer, o ves diferente o nada o todo o solo a ella. Me viene a la cabeza una rayuelada tomada de su capitulo 126
Por qué, con tus encantamientos infernales, me has arrancado a la intranquilidad de mi primera vida... El sol y la luna brillaban para mí sin artificio; me despertaba entre apacibles pensamientos, y al amanecer plegaba mis hojas para hacer mis oraciones. No veía nada de malo, pues no tenía ojos; no escuchaba nada de malo, pues no tenía oídos; ¡pero me vengaré!
Discurso de la mandrágora
en Isabel de Egipto
de Achim Von Arnim
en Isabel de Egipto
de Achim Von Arnim